Hasta el año 1948, el mar fue la única vía de comunicación de la provincia de Tierra del Fuego, por ello la importancia de este museo que un grupo de voluntarios, la Armada y la Municipalidad, sostienen con fines histórico-culturales.
Simboliza un recorrido por la historia de la provincia de Tierra del Fuego a través de sus barcos y navegantes, exponiendo una colección de maquetas navales que, en forma cronológica, marca la evolución de la construcción del transporte náutico.
Este museo se ubica en los pabellones Nº 3 y Nº 4 del Ex Presidio, compartiendo las instalaciones con la historia, las huellas, los objetos y el eco del extraño silencio de lo que fue la cárcel de reincidentes y sus moradores durante años.